Plan International, organización internacional de desarrollo y ayuda humanitaria, presente en más de 75 países en el mundo, viene trabajando en el Perú hace más de 25 años, transformando la vida de niñas, niños y adolescentes en situación de vulnerabilidad en más de 234 comunidades alrededor del país.
La peor crisis de salud de esta generación está afectando gravemente a todos, con un número creciente de víctimas mortales. No obstante, si no tomamos las medidas necesarias, las consecuencias en nuestro país podrían ser mucho más devastadoras.
Plan International insta a que el gobierno tenga en cuenta a los grupos de población más vulnerables en su respuesta a la propagación del COVID-19.
Como organización que trabaja con las comunidades, estamos muy preocupados por la forma en que la población más vulnerable y excluida tendrá que hacer frente al grave impacto sanitario, social y económico de esta crisis.
Seguimos de cerca las directrices de salud pública transmitidas por el gobierno central, el Ministerio de Salud (MINSA) y la Organización Mundial de la Salud (OMS). De la misma manera, seguiremos apoyando al Ministerio de la Mujer y Población Vulnerable (MIMP) en la difusión de mensajes de prevención, así como los canales y números de denuncia contra todo tipo de violencia contra niños, niñas y adolescentes, para erradicar la violencia familiar.
Así mismo, en vista del estado de aislamiento obligatorio que se viene cumpliendo en el país ante las graves circunstancias que vienen desarrollándose, queremos informar que hemos suspendido temporalmente las actividades presenciales en campo. Sin embargo, continuamos con nuestra labor de apoyo a niñas, niños, comunidades y sistemas locales.
Nuestra experiencia en crisis previas nos ha demostrado que las niñas y las jóvenes se ven especialmente afectadas durante las emergencias sanitarias. Aunque los niños y niñas parecen verse menos afectados por el COVID-19 que las personas adultas, la pandemia tendrá un impacto en el entorno en el que ellas y ellos crecen y se desarrollan. Los desafíos para la niñez, y en particular para las niñas, van desde la interrupción de la educación, el aumento del riesgo de violencia sexual y física, y riesgos para la salud mental.
Estamos trabajando para apoyar y proteger a las niñas y niños más vulnerables de todo el Perú de la mejor manera posible. Nuestra respuesta se centra en la colaboración con las comunidades, el gobierno y las organizaciones aliadas para hacer frente a la emergencia del COVID-19, incidiendo en acciones de protección infantil, educación, salud sexual y reproductiva, e higiene y lavado personal.
Asimismo, apoyaremos en la creación de contenido educativo digital, para evitar que los niños y niñas pierdan el año escolar.
Nos enfocaremos en los padres, madres, cuidadores, docentes y en los proveedores de servicios de salud, para asegurar que las niñas y niños reciban el apoyo que necesitan durante esta crisis.