Celeste: "Podemos ayudar a cambiar el mundo"

22 dic, 2022 - 2 min


Hola mi nombre es Celeste y tengo 11 años. Vivo en el distrito Castilla en la región Piura con mis padres.

Cuando llegó Plan International con el proyecto Formando Emprendedores del Mañana a mi colegio tuvimos la oportunidad de pensar en iniciar un emprendimiento y queríamos hacer un producto sostenible, que sea de uso diario y que no requiera envase. Aquí nació la idea del Shampoo Sólido Bio orgánico que gracias al concurso de capital semilla hemos podido seguir creciendo.

Con mi club emprendedor “Piuranitos y Piuranitas Emprededores” creamos la idea de negocio del Shampoo Sólido, con la ayuda de la profesora investigamos en cómo hacer un shampoo en barra, vimos referencias por internet y nos pusimos a elaborar con productos naturales como manzanilla y menta. Al inicio hicimos prueba con un compañero y vimos cambio en su cabello a los 5 días, se veía un cabello suave y brilloso.

Luego de la etapa de prueba, vimos que teníamos el potencial de crear el producto, pero no contábamos con un espacio adecuado en ese momento y con la ayuda de la profesora logramos ambientar un espacio en el colegio.

Para crear nuestro Shampoo Sólido, mezclamos los ingredientes, se compactan y lo dejamos secar hasta que se haga una barra sólida. Es importante resaltar que con nuestro emprendimiento hemos aprendido que podemos impulsar cambios, como el promover que más personas apuesten por cuidar el medio ambiente, reduciendo la cantidad de botellas de plástico que se usan versus los productos más tradicionales

 

 

En mi club emprendedor yo me encargo de exponer, por ejemplo, expuse para el concurso de capital semilla en la Dirección Regional de Educación de Piura. Aquí al inicio estaba nerviosa, pero entramos con la idea de ganar y así fue, lo logramos.

Un gran consejo que podría darles a niños, niñas y adolescentes es que con nuestras iniciativas podemos ayudar a cambiar el mundo y solucionar problemas como los que hay con el cuidado del ambiente. Lo que les recomendaría a otros y otras emprendedoras es que no se rindan que ¡sí se puede!